Cuatro años después de su descenso ante la Spezia en la promoción, el Hellas Verona retorna a la Serie B. Lugar, igualmente, insatisfactorio para su historia, a pesar de que en Serie B (50) disputara más temporadas que en Serie A (35). Su primera puesta en largo fue en la temporada 1912-13, en Serie A, como miembro fundador. Y no fue, hasta la 29-30, que descendiera a Serie B. En la Serie C, actualmente Lega Pro, ha estado seis temporadas, contando las cuatro últimas. Con esos datos, ya pueden hacerse una idea de la magnitud de un club que ha militado fuera de su hábitat natural. Recuerda al caso del Real Oviedo, por citar un ejemplo de casa. La temporada que viene hará diez años de su última estancia en Serie A.
El ascenso llega un año tarde
A finales de temporada de la 09-10, el Verona lideraba la tabla con solvencia. Sin embargo, empezó a aflojar y cayó a zona de promoción, en lugar de ascender directamente, terminando como tercer clasificado. Fue entonces cuando cambió de técnico. Destituido Remondina, llegaba Vavassori. Tras superar al Rimini, se mediría al Pescara en la promoción final. Tras empatar a dos en el Bentegodi, la derrota fuera de casa por 1-0 privó del sueño del ascenso.
Deportivamente imposible, se abría la vía del ascenso en los despachos, pues se esperaba que el Verona pudiera optar a la plaza dejada por el Ancona en la Serie B, que desapareció. Pero no fue así finalmente y debía disputar, por cuarto año consecutivo, el campeonato de la Liga Pro. Nuevo proyecto, en manos de Giuseppe Giannini, la mala racha del equipo propició su despido en noviembre. En su lugar llegaba Andrea Mandorlini, el héroe del ascenso. Llegó con el equipo en plena lucha por no disputar el play-off de descenso y, de la mano de Mandorlini, el equipo finaliza la temporada en el quinto puesto, lo que le vale un billete para optar al ascenso, junto al Gubbio, líder de grupo. Precisamente quedaba por delante del Spezia, equipo que hizo descender al Verona a la C.
Sorrento era el primer rival del Hellas en la travesía hacia la Serie B. Victoria en casa por 2-0, el empate a uno en la vuelta emparejaba al Verona con la Salernitana en la segunda eliminatoria por el ascenso. Como en la primera, victoria por 2-0 en casa y viaje a Salerno para certificar el ascenso. Y así fue. A pesar de perder por 1-0 en la ciudad de Romeo y Julieta ya se titulaba como "la derrota más dulce". El retorno a la Serie B era una realidad. Ahora, a intentar volver a Serie A cuanto antes.
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